El nacimiento

Aburrida de la monotonía salí decidida a terminar con todo lo que me ataba a esta ínfima parte del universo, caminé por calles a las cuales no le llegaba luz de faroles, ni de casas, estaba realmente cansada de que las historias no tuvieran mucho que contar, acaso no existía nada más allá de lo que veía día a día. Caminé como nunca antes, por un pasillo de callejuelas cerca de los antros que solía frecuentar, observando todo a mi alrededor, todo es más bello sin la presencia de la luz del sol, la noche era perfecta sin pensar en el pasado, sólo extasiada de la hermosa maravilla nocturna que antes había pasado por alto, me sumergí en una de las tantas calles delgadas y largas que aparecían paso tras paso, y entonces algo salió de un rincón, no se cómo ni por qué, pero "eso" me tomó, creía que  por fin había encontrado mi término, el tan ansiado final de la historia, sólo cerré los ojos, sentí como "eso" me respiraba cerca del rostro, pero se demoró un tiempo antes de atacar, entonces sentí como se desgarraba mi piel, separandose las fibras una a una, pero no quería hacer nada por soltarme simplemente me dejé caer, sentí como lentamente se iba mi vida, la respiración sesaba, mis pupilas se dilataban, mi corazón dejaba de latir. El viento era cálido y caían pequeñas gotas sobre mi cuerpo que se deslizaban a través de mi piel, entonces mi mano tocó el suelo húmedo y "eso" tomó mi cabeza y dejó caer un líquido en mi boca, con algo de sabor ferroso, de pronto simplemente ya no latía mi corazón, pero aún sentía la lluvia en mi cuerpo, sentí olores que antes no había sentido, incluso la lluvia se sentía más fuerte y como se fundían las moléculas en mi piel, el viento era maravilloso, y la oscuridad, eso fue aún más bello, los colores a la lejanía de las calles destellaban con fuerza, podía escuchar las palpitaciones de las personas, pero estas estaban lejos de mi. Me levanté y "eso" mi estaba mirando sentado en un altar de algún muerto en un accidente. me miró fijamente y se expresó.
- buen despertar dama-
Su voz era profunda, pero no le podía ver el rostro, sólo su traje, nada extraño para estar cerca de los antros de la Alameda, es más es bastante típico una capa larga de cuero, su camisa era de un estilo anticuado con vuelos en el frente y en las mangas de un color crema, los pantalones negros de algún tipo de tela que no reconosco y botines limpiamente lustrados que brillaban pese a estar lloviendo,era casi como si no tocase el suelo al caminar.
-Qué sucedió por qué no estoy muerta si sentí como dejaba de respirar-
-Oh!, querida eso es lo que menos importa, ya lo averiguarás...
Sin terminar de decir esa frase y yo sentí como en mi interior algo me impulsaba a moverme, tenía sed, pero una sed distinta, una necesidad de ese líquido que antes me había hecho beber "eso".
-Veo que ya tienes hambre, querida, ven te enseñare algunas cosasque son necesarias para que sobrevivas,- hizó una pausa y continuó.- y no me delates...
Entramos a un pub y un tipo ebrio se acercó  a nosotros, cantando y riendo, "eso" me dijo que lo llevara al pasillo donde habíamos estado antes, y sin que nadie lo viera salió. mi sed era incontrolable, pero no sabía como apagarla, mareada y sin sentidos tomé al tipo quién me miró con cara de pervertido, lo llevé a ese rincón, ahi me esperaba "eso" quién en un movimiento llegó a nuestro lado, tomó al ebrio e incó sus dientes en el cuello el tipo sólo exhaló un pequeño gritó y se dejo tumbar, "eso" me acercó al ebrio y me dijo bebe, algo extrañada mi parte aún cuerda se quería rehusar, pero la sed se incrementó y entonces me abalancé al cuello y sentí como ese líquido era el mismo sabor que antes había percibido, me llenaba de una calidez que antes no había sentido, me gustó de sobremanera, y no quería parar pero "eso" me detuvo.
-No tomes, después de muerto puede provocar tu muerte, hay varias cosas que debes saber existen mitos y realidades como por ejemplo que la luz del sol te matará dolorosamente como un cáncer de piel, eso es un mito aunque no lo creas  puedes estar de día, sólo que no puedes estar bajo la luz de sol demasiado tiempo, los días nublados y las noches son preferibles para salir a cazar, es por ello que preferimos estar alertas durante la noche...
 Aún extasiada no comprendía todo lo que me decía, sólo logré entender algo, lo que había soñado por tanto tiempo se convertía en realidad, la fantasía si existía..."eso" que me había abordado en aquel pasillo no era nada menos que un vampiro, tenía demasiadas dudas, pero el licor que recorría las venas de aquel sujeto, me aturdía, y me tambaleaba como si me fuese a desmayar, hasta que caí sin saber quien era "eso", que me había transformado
Es así como comenzó mi historia de no vida, mi historia como Kadriel...